"Nada podemos esperar sino de nosotros mismos" | SURda |
|
08-08-2016 |
Contigo a la distancia
Tabaré y el ajuste por Ombú
Lourdes Rodríguez
Un año después de decretar la esencialidad en la educación, el presidente Tabaré Vázquez volvió a marcar territorio en su relacionamiento con el movimiento sindical, aunque esta vez puso marcha atrás en sólo 24 horas. Los recortes en las partidas para la educación previstos en la rendición de cuentas lo enfrentan con diferentes organizaciones sociales y con la mayoría de la bancada oficialista.
En las horas previas a la elección de autoridades de su partido, Vázquez buscó exhibir cierto halo de frenteamplismo: utilizando el portal de Presidencia hizo saber que su "intención de participar" se vio frustrada por recomendación de la Corte Electoral (la Constitución establece que el presidente no puede intervenir "en ninguna forma en la propaganda política de carácter electoral" ). Publicó el escrito con la consulta firmada por el prosecretario Juan Andrés Roballo y la respuesta del ministro Wilfredo Penco. Así, la epistolar fue la vía elegida por el primer mandatario para sus apariciones públicas en esta semana.
Después de esa guiñada, a la mañana siguiente de la incursión por las urnas de los frenteamplistas más fieles, Vázquez (que venía con viento en la camiseta con su triunfo mundial ante las tabacaleras) le propinó un balde de agua fría al movimiento sindical al comunicar por carta su negativa de concederle una reunión a la directiva del Pit-Cnt. El mandatario se sintió ofendido, entre otras cosas, porque la dirigencia calificó a su gobierno de "neoliberal" y se vio amenazado ante expresiones que prometían una "conflictividad gigantesca" nunca antes vista en administraciones frenteamplistas. Apeló a un diálogo "responsable" , "en serio" y "sin diatribas" . Pero la misiva se conoció el martes junto a otra, la respuesta de la central obrera, donde se dejó constancia de que las declaraciones por él evocadas no buscaban "faltarle el respeto ni amenazar o provocar diatribas" ni al gobierno, ni a su persona, ni a su "alta investidura" . Esto satisfizo a Vázquez al punto que, 24 horas después y a través de otro mensaje escrito, dio por "superado el desencuentro" y restituyó el diálogo.
Pero antes de que la situación llegara a este punto a la plana mayor del Pit-Cnt le voló la bata. En una seguidilla de apariciones en la prensa, consideró que se les pudo haber "ido el tono" en más de una ocasión e incluso hubo retractaciones (por ejemplo, el presidente de la central obrera, Fernando Pereira, matizó y vertió: "como movimiento sindical no consideramos que estemos frente a un gobierno neoliberal" ), pero eso no impidió que se fueran en reproches. Porque el diálogo, interrumpido a pesar de los cientos de miles de trabajadores que acataron el paro general hace dos semanas, nunca llegó a estar en entredicho en el caso de los empresarios ni con la oposición, a pesar de experimentar pronunciadas diferencias o proferir cuestionamientos públicos. "He escuchado a miembros que hoy integran la mesa de negociación de seguridad con el gobierno que comparado con nosotros han dicho cosas enormemente duras. Sin embargo, el presidente, como debe ser, dialoga con ellos en búsqueda de acuerdos" , apuntó Pereira en radio Sarandí, aunque sin alusión directa a los dichos del líder nacionalista y senador Luis Lacalle Pou que, luego de promover el retiro de su partido de las aludidas reuniones, habló de dos "mundos paralelos" : el de Vázquez en la Torre Ejecutiva y el de "la gente" (véase página 9).
Pero ahuyentada la humareda de estas cartas de desamor, lo que volverá a colocarse en primer plano es el asunto de fondo: la pérdida salarial de los trabajadores. Cuando Vázquez los recibió en marzo en su residencia de Suárez y Reyes les hizo saber que no cambiaría las pautas salariales previstas, pero se comprometió a "controlar la inflación" y evitar una caída del salario real. En el primer Consejo de Ministros de julio, el ministro de Economía, Danilo Astori, fue en la misma línea, interpretando incluso que "los salarios reales han seguido creciendo" , lo cual fue cuestionado por el Pit-Cnt. Su centro de estudios, el Instituto Cuesta-Duarte, documentó con datos numéricos la pérdida salarial en al menos 13 sectores. 1 Luego vinieron el paro general, la solicitud de entrevista a Vázquez y el consabido intercambio escrito.
No es la primera vez que Vázquez abre una línea de fuego de esta magnitud. Hace un año la ministra de Educación (a modo de apostilla, la única de sus ministros que firmó el veto a la despenalización del aborto en su primer mandato) anunciaba la firma del decreto de esencialidad de la educación, que no sólo amputó el diálogo con los representantes sindicales sino que profundizó una movilización social que hasta el momento no había tomado color. En aquella oportunidad Vázquez demoró una semana en retroceder, con la intervención del FA mediante.
LA "NO PROPUESTA".
El lunes, el mismo día que mandaba la primera correspondencia al Pit-Cnt, Vázquez también enviaba al Parlamento a una parte de su séquito para trasmitir que no aceptaba el paquete de siete medidas propuesto por la mayoría de los legisladores frenteamplistas como alternativa para evitar los recortes presupuestales en la educación. El artículo seis de la rendición de cuentas dispone un abatimiento del gasto previsto en la ley de presupuesto para 2017 que, de aprobarse, afectaría a la Universidad de la República (Udelar), al Hospital de Clínicas, a la Anep y la Utec (véase recuadro).
La propuesta de la mayoría de los sectores oficialistas (Mpp, PS, Pcu, Pvp, Ir y Compromiso Frenteamplista) consistía básicamente en subir las tasas del impuesto al patrimonio y a la herencia y en revisar exoneraciones fiscales en juegos de azar, pero el gobierno (representado por Roballo y el director de la Unidad de Presupuesto del Ministerio de Economía y Finanzas, Michael Borchardt) determinó que eso no era una posibilidad. En cambio, propuso reasignar a la educación 500 millones de pesos.
El 13 de julio, día anterior al paro general del Pit-Cnt, la bancada (ahora claramente dividida, con un Fls encolumnado con el gobierno) emitió una declaración luego de mantener una reunión con el subsecretario de Economía, Pablo Ferreri, donde dejó claro que no estaba dispuesta a votar nada que resienta el presupuesto de la educación. Además, reparó en la necesidad de atender los "planteos justos y oportunos de parte de los movimientos sociales" cuyos actores "son fundamentales e insustituibles para que el proceso de cambios de la izquierda que vive Uruguay siga avanzando". Asimismo se destacaba el "clima muy fraterno y constructivo" entre los diputados y el gobierno.
Pero este último lunes el clima ya no era tal. "El Ejecutivo nos trajo una no-propuesta" , protestó un diputado en diálogo con Brecha , mientras que otro, de un sector diferente, apreció: "esto está explotando" . Que Vázquez y el equipo económico enviaran una delegación "sin autorización" para dialogar causó molestia, pero también impacientó la exigua alternativa que se les trasladó. Para empezar, porque los 500 millones de pesos (es decir, unos 16 millones de dólares) que el gobierno "autoriza" a reasignar es apenas un tercio de la totalidad del presupuesto educativo que buscan conservar (50 millones de dólares), y, para seguir, entienden que "no hay de dónde sacarlo" . "No hubo apertura a la negociación, (Roballo y Borchardt) sólo podían autorizar la propuesta e irse sin discusión. El Ejecutivo no nos tiene que autorizar nada, el Legislativo tiene facultades para hacer reasignaciones. La rendición ya vino toda peinada, pero además tendríamos que decidir a qué área de la educación afectar; los malos de la película terminaríamos siendo nosotros. El costo de hacer recortes en la educación es muy grande, además de que se hipoteca futuro" , señaló a Brecha un diputado tras la reunión.
LA LETRA CHICA.
En otro plano (o en el mismo) se sigue discutiendo si el alcance de este ya disputado artículo formó parte o no del acuerdo del 2 de junio entre Vázquez y el Frente Amplio (FA). Ese día las cámaras capturaron a un Vázquez rodeado de legisladores y de los integrantes del Secretariado Ejecutivo de la coalición, todos sonrientes. La noticia: el presidente había aceptado todos los cambios en la rendición de cuentas que su partido había propuesto, especialmente las modificaciones de las franjas del Irpf y la disminución de carga del ajuste fiscal en los sueldos más bajos (tales como las había planteado el Pit-Cnt a través del Cuesta-Duarte).
Pero con el advenimiento del tratamiento del articulado en la comisión parlamentaria y las idas y vueltas con el gobierno, comenzó a instalarse una sombra de duda acerca de si en aquella instancia existió o no el compromiso de no postergar determinados gastos, en particular los que afectaran a la educación. "Nosotros respaldamos el acuerdo que se hizo con Vázquez" , sostuvo un diputado del Fls en diálogo con Brecha . En cambio desde el emepepismo se señala que, en todo caso, tal acuerdo es "por los 460 millones de dólares de ajuste" (lo cual implica un punto del déficit medido en Pbi) y lo que "hicimos fueron propuestas para financiar ese ajuste sin hacer recortes en la educación" . Aquel día Vázquez también ratificó la reforma de la Caja Militar como parte del paquete de medidas de ajuste fiscal aunque señaló que se enviaría un proyecto de ley aparte, algo que todavía no ha ocurrido y también inquieta entre los alfiles de la otra Cámara, la de los senadores. Constanza Moreira dijo a Brecha que hasta el momento no han tenido ninguna novedad sobre la reforma, aunque se dijo que iba a comenzar a aplicarse en 2017, y valoró que de algún modo la intención de afectar los privilegios de la corporación militar era la "contraparte" de los indigestos recortes en las áreas sociales (véase nota en página 5).
El martes, mientras los diputados oficialistas estaban de reunión en reunión, la Intergremial Universitaria (que nuclea a estudiantes, trabajadores docentes y no docentes de la Udelar y el Hospital de Clínicas) se movilizaba en las inmediaciones del Palacio Legislativo con la consigna "Si hay recorte, hay lucha. En defensa de la Universidad. No al recorte". "Sobre el planteo del Ejecutivo no tenemos opiniones, lo que nosotros queremos evitar son los recortes" , precisó a Brecha Daniel Olivera, secretario general de Affur (sindicato de los funcionarios de la Udelar). El vocero sindical destacó que en los últimos días han recibido "buenas señales" de la bancada frenteamplista ( "se tomaron su tiempo para atendernos" ) frente a las gestiones que han venido realizando y señaló que la responsabilidad de buscar fondos que eviten el tijeretazo es del equipo económico.
CARRERA CONTRA EL TIEMPO.
La cuestión es que el punto álgido de los desencuentros con el gobierno vazquista comenzó en los descuentos de la finalización del plazo constitucional para que la rendición ingrese al Senado, lo que debe ocurrir el 4 de agosto. El miércoles, después de cinco horas de reuniones y dos cuartos intermedios, todos se retiraron a sus domicilios sobre las diez de la noche sin llegar a un acuerdo. En la mañana de ayer comenzó la votación de la rendición en la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda con el criterio de dejar para el final el conflictivo artículo 6, a la espera de que el gobierno acercara otra alternativa.
A media tarde el Fls puso sobre la mesa una nueva propuesta bendecida por Vázquez y por Astori. "Es una alternativa que protege gran parte del gasto educativo. Estamos esperando respuestas" , valoró en diálogo con Brecha el diputado Alfredo Asti (Asamblea Uruguay). La bancada se encontraba analizándola mientras se escribían estas líneas, pero no se era muy optimista. De no producirse novedades, se iba a proceder a votar todo el articulado, independientemente de si se lograba alcanzar o no un acuerdo. Llegado el caso, y si el artículo 6 no fuera aprobado por el oficialismo, el asunto deberá ser dirimido por los senadores, que contarán con 45 días para aprobar la rendición tal como viene o bien realizarle modificaciones.
Mientras esto ocurría en el Palacio de las Leyes, la Integremial Universitaria mantenía la ocupación de la sede de la Udelar como medida de fuerza al tiempo que resolvía otras. Porque, pase lo que pase, a partir del lunes próximo el texto de la rendición será considerado en el plenario de la Cámara de Diputados, seguramente con las barras a pleno. El martes, en tanto, los funcionarios de la Udelar ocuparán la Facultad de Medicina. De acuerdo al secretario general de Affur, están dispuestos a ir a más: "Si el Parlamento vota el artículo del recorte tal cual está, vamos a proponer a los centros de base de la intergremial un paro por tiempo indeterminado" . A esto se suma el paro general parcial que el Pit-Cnt concretará a fines de agosto o principios de setiembre.
Aunque a Vázquez le desa-grade el conflictómetro, es evidente que las decisiones "casi sin concesiones ni discusiones" del titular del gobierno y su "superministro" de Economía (al decir de Gerardo Caetano en la anterior edición de Brecha ) abren grietas en la izquierda social. Para el historiador y politólogo, lo peor que le puede pasar a un gobierno cuando enfrenta una situación crítica es volverse sordo y soberbio: la gente elige partidos, no monarcas electos.
- Productos textiles (1,95 por ciento); fabricación de prendas de vestir y teñidos de piel (2,3 por ciento); curtiembres (0,88 por ciento); fabricación y productos de papel (1,94 por ciento); encuadernación, impresión y edición (0,79 por ciento); fabricación de productos de caucho y plástico (0,65 por ciento); fabricación de productos metálicos, maquinaria y equipos (2,79 por ciento); fabricación de automotores (2,23 por ciento); hoteles y restaurantes (1,04 por ciento); transporte fluvial (0,58 por ciento): enseñanza privada (0,06 por ciento); salud en el sector privado (1,25 por ciento).
Los recortes en juego
Estos son los montos en pesos que se verían afectados si se aprobara el artículo 6 sin modificaciones.
l Udelar: Recuperación salarial del convenio colectivo (337 millones), dedicaciones totales (30 millones), becas de posgrado e investigación (117 millones), gastos de funcionamiento del Hospital de Clínicas (60 millones), convenios con Asse, el Clínicas y las unidades docentes de asistencia (105 millones).
l Anep: Creación de cargos en liceos nuevos y extensión de horario a tiempo completo (793 millones).
l Utec: 100 millones.
l Inau: 69 millones.
Artículo publicado en:
Editorial. Educación: de la crisis recurrente al proyecto alternativo
Pisando el siglo XXI, reflexionaba Eduardo Galeano que si Alicia (la del país de las maravillas) volviera a nacer, “no necesitaría atravesar ningún espejo: le bastaría con asomarse a la ventana” para descubrir el mundo al revés. La imagen sirve para describir el actual estado de nuestra discusión educativa, de la que seguramente Galeano hubiera podido extraer varias viñetas para su libro “Patas arriba. La escuela del mundo al revés”. En efecto: cuando un editorialista de Búsqueda se parece a un teórico “reproductivista” de la educación denunciando al sistema educativo por reproducir las injusticias sociales, algo no está en su sitio. Cuando una ministra de educación intenta descalificar a alguien llamándole “maestro de escuela”, las cosas no están bien. Cuando ante un reclamo docente el gobierno responde con un decreto de esencialidad, una lógica policial se impone a la lógica político - educativa. Cuando los políticos responsables de presupuestos raquíticos para la educación pública durante décadas aparecen de pronto sin pudor en la primera línea de alarmados por el deterioro educativo, hay algo desconcertante. Lo mismo sucede cuando los “técnicos” que formularon las últimas reformas curriculares y modas didácticas pregonan, sin acuse de recibo de fracaso alguno, nuevas recetas salvadoras. O cuando los que repiten que la educación debería estar centrada en los adolescentes luego impulsan una y otra vez proyectos para encarcelarlos. La irresponsabilización disfrazada de responsabilidad es oportunismo. El menosprecio a los maestros es ignorancia. En ambos casos el mensaje (educativo) que se transmite a la sociedad es lamentable.
Así las cosas, patas arriba, no es sencillo en la actualidad formular a la educación como problema. La situación es paradójica. Por una parte la educación convoca hoy (y desde hace un buen tiempo) una atención pública y mediática importante y cotidiana. Por otra parte, la sobreabundancia de opiniones lanzadas y repetidas por vía del bombardeo noticioso, tecno-académico, político y a veces policial, generan una suerte de clima confusional donde resulta muy dificultoso pensar.
De todos modos, entre confusiones y crispaciones: ¿qué pasa con la educación uruguaya?
En este número convocamos a educadores, estudiantes y académicos pertenecientes al hemisferio de las izquierdas para reflexionar en torno a dos grandes ejes: el estado de situación de nuestra educación pública y las líneas programáticas que es necesario impulsar hacia un proyecto pedagógico alternativo de mediano y largo plazo.
Queremos alejarnos del tratamiento escandaloso de la crisis educativa cada vez más narrada como libro del apocalipsis o crónica policial. Queremos sortear la encerrona del diagnóstico tecnocrático y tecnoburocrático que achaca a la educación los problemas sociales y reclama mano dura para aplicar medidas urgentes de corte eficientista, productivista y/o privatizador. Queremos sortear también la visión que atribuye exclusivamente a los problemas sociales las dificultades de la educación y posterga a un futuro ideal de autonomía y cogobierno la formulación de un proyecto educativo que atienda las problemáticas realmente existentes. Quisiéramos promover una perspectiva dialéctica que aborde los procesos sociales, culturales, económicos y educativos en sus complejas interrelaciones y su historicidad. Una mirada que se nutra de los aportes de la investigación sociológica, económica o psicológica, pero que los ponga al servicio de una reflexión filosófica y político - pedagógica. Quisiéramos, por fin, enfocarnos en la reflexión sobre las bases para la construcción de un proyecto educativo alternativo que vuelva a poner a los educadores en la vanguardia de la construcción político pedagógica de nuestro país.
En un mes de rendición de cuentas, con este número Hemisferio Izquierdo se suma a la lucha en defensa de la educación pública y contra los recortes de su presupuesto.(Publicado en hemisferioizquierdo)